Sergio Corona nos compartió anécdotas con el “loco” Valdés y Alfonso Arau, entre otros

Sergio Corona Ortega es un actor, comediante y productor apreciado tanto por sus compañeros de actividades como por el público que lo ha conocido con diferentes apodos, entre ellos “El bodoquito” “El señor Miyagui”, “chaparro”,  “el fan número uno de las chivas del Guadalajara” y “Julio Regalado”, entre otros más.  En sus inicios destacó como bailarín y posteriormente al unir su talento al de Alfonso Arau, fueron una de las parejas más talentosas. 

Lo que poco saben y que ahora en exclusiva nos cuenta don Sergio, es que la relación con quien también fuera su cuñado, resultó áspera y en ocasiones hubo fricciones muy fuertes entre ambos. También en corto nos confesó cual fue el secreto de su compadre Manuel “Loco” Valdés para conquistar a las mujeres.

En su juventud Sergio fue un muchacho ingenuo y poco conocedor de la maldad de este mundo y eso lo decimos porque en sus inicios lo confundieron como un muchacho homosexual y hubo muchas invitaciones a departir en las casas de famosos intelectuales de la época y directores de baile y hasta le ofrecieron costosos regalos. Afortunadamente él nunca aceptó ninguna invitación y menos los esplendidos obsequios con los cuales pretendieron persuadirlo.

De todos es sabido que la pareja Corona y Arau fue una de las más importantes del medio artístico de los años 50 del siglo pasado. Sus presentaciones provocaban llenos en los teatros donde se presentaban y en el cine las películas donde tomaron parte fueron muy exitosas. Lo que poca gente sabía es que la relación personal entre ambos no fue tan agradable como él hubiera querido debido a que Alfonso era una persona con una personalidad conflictiva y llegaba a ser hasta grosero con los empresarios que los contrataban.

Sergio nos comentó que gracias al éxito que tenían como bailarines, siempre les daban una prórroga del contrato inicial. Lo malo es que los empresarios lo platicaban primero con su ex cuñado y nunca pensaban que tuviera una actitud tan grosera con ellos y hasta aventaba al suelo los contratos y se salía de las oficinas. Sergio tenía que ofrecer disculpas y aceptar las prórrogas a nombre de los dos.

“Aunque evitaba tener roces con Alfonso una vez sí me colmó la paciencia porque me insultó haciendo alusión a mi señora madre. Eso no lo toleré y le dije también de la suya. A los siete años de haber iniciado como Corona y Arau, concluimos la relación laboral cuando me hermana me informó que había terminado su matrimonio con él”.

De todos es conocida la gran amistad que se dio entre Sergio Corona y “El loco” Valdés, la cual inició cuando él se integró a un equipo de futbol que se creó al interior de Telesistema Mexicano (ahora Televisa), donde Manuel era un jugador destacado. “Había un joyero judío que vendía en abonos y muchas veces Manuel le compraba joyas costosas las cuales obsequiaba a las chicas que él pretendía conquistar. Aunque reconozco que mi compadre le caía muy bien a las jovencitas gracias a su simpatía y carisma también le gustaba ser espléndido con ellas, pues las joyas que les regalaba eran muy finas, buenas y costosas”, indicó.

En cuanto a la relación que tuvo con los socios de Pecime, agradeció que en su juventud Estela Matute, le haya permitido acompañarla como su pareja de baile en una temporada que ella ya tenía pactada en la Habana, Cuba, país que Sergio ansiaba conocer. “Ella bailaba con Roberto Cobo ‘Calambres’ pero tuvieron un disgusto y se separaron y ya estaba el compromiso de hacer unas presentaciones en Cuba y sin pensarlo me abordó y me dijo que si quería acompañarla en lugar de ‘Calambres’, obviamente acepté, aunque a la hora de la paga no fue la que me había prometido porque según ella el empresario le dijo que pagaría menos porque yo no tenía el nombre que tenía su anterior pareja acepté recibir ese dinero que  era mucho menos del que habíamos convenido”.

También agradeció a nuestro ex presidente Enrique Rosado que haya tenido la deferencia de poner por primera vez el nombre de Sergio Corona en una nota periodística publicada en los años 40 del siglo pasado en el periódico dominical “El redondel”. Sergio y Enrique tuvieron una relación de amistad y en algunas ocasiones coincidieron en viajes relacionados con actividades profesionales de ambos.

Finalmente, Sergio Corona nos manifestó su agradecimiento a todos los socios de Periodistas Cinematográficos por la Diosa de Plata que el 19 de marzo pasado se le entregó para reconocer sus 78 años de trayectoria profesional. “Son reconocimientos que motivan y mucho más para mí, pues he transitado por tantos años en este ambiente haciendo amigos y disfrutando lo que me ha dado la vida. Muchas gracias a Pecime por este reconocimiento y sobre todo por respaldar al cine mexicano con su premio”, finalizó.

Esa noche, tuvimos el honor de que don Sergio Corona haya firmado el libro de oro de Pecime, donde también dedicó emotivas palabras para todos los socios de la agrupación y su agradecimiento por haber sido reconocido en sus 78 años de trayectoria.